Bonito dibujo de internet novela escrita por mi |
Llegó el sábado y Carlos acababa de llegar. Tocó el claxon, para que la mujer supiese que había llegado. Ella salió a recibirlo. Un beso en cada mejilla recibió de él.
Sacó bolsas de compra, con muchísimas cosas que no le había encargado. Las depositó en el suelo de la cocina.
-¿Como estás?
-¡Bien, hijo! Siéntate, que tengo que decirte algo. -Lo dijo en un tono no acostumbrado. Carlos la miró interrogante.
-¿Que me quieres decir?
-Primero te diré que mi padre no se suicidó. -La mujer le contó a grandes rasgos todo lo que sabía por boca de Luis. -Ya nada se puede hacer, quienes lo mataron ya no están entre los vivos. Tengo que decirte otra cosa, no pienses que estoy loca por ello.
-Anda, dime. Que me huelo lo que es.
-Tengo a alguien. Un amigo de cuando vivía aquí, estamos juntos.
-Eso es una buena noticia, no sabes cuanto me alegro por ti.
-Lo se, lo se. No hace falta que me lo jures, te conozco como la palma de mi mano que para eso soy tu madrina.
-¿Y dónde, está tu amor?
-Ha ido a buscar sus enseres personales, ya está por llegar. Ya verás como te gusta, a ti también.
Se escuchó la llave girando dentro de la cerradura de la puerta. Por ella apareció un hombre mayor no mal parecido. Se llevó una sorpresa al ver que Dolores tenía visita. Según ella le había dicho Carlos vendría mucho más tarde.
- Os voy a presentar. Luis, este es Carlos, mi ahijado.
Se estrecharon las manos. Los dos eran grandes personas. La mujer miraba a ambos muy satisfecha. De distinta forma los quería a los dos.
Autora Verónica O.M.
Continuará
Autora Verónica O.M.
Continuará
Buen comienzo con el ahijado, besines!
ResponderEliminarPara silvo
EliminarMuy bueno, si, inmejorable.
En el anterior capítulo narro cómo Luis ya se instala en casa de Dolores, ¿lo has leído? si puedes hazlo, te gustará.
Besos
Me gustó. Espero el siguiente.
ResponderEliminarUn beso.
Para Josefa
EliminarMuchas gracias, Josefa, no sabes cuánto me alegra saberlo.
Besos