Seguimos...
Rodolfo se despidió del padre de Amada y se dieron un buen apretón de manos. En realidad fué el mayor quien más apretó porque el joven parecía más blando que un bizcocho. Aquí no se entendía como para la cama servía... El padre de Amada es lo que pensó ... Pero tan solo fue por un segundo, ya que reparó más en que su querida hija se amancebaria con alguien que tenía castillo propio y aunque no fuese alguien noble, se conformaba. Mejor este que otro que no tuviese a su hija como merecía.
Algo le decía que aquel tenía muchas monedas de plata. Y Cándido no se equivocaba, lo que no sabía es el tiempo que cada día invertia en sacarles brillo ni la cantidad tampoco.
Por mucha imaginación que tuviese el otro tenía el triple o mas.
Vayamos a ver lo que la otra pareja hace.
Vidal intenta rodear a Adelita por la cintura y a su vez besarle el cuello. Sus brazos por mucho que los estire no la abarca toda, pero la intención ha sido buena y Adelita le premia con un beso que lo deja sin aliento.
Y sonríe como un lelo, feliz si, pero esa cara no se la quita nadie.
Esto marcha bien y acabará muy pronto.
Autora Verónica O.M.
Veremos, veremos, como sigue el asunto del "lelo" félix...
ResponderEliminarUn abrazo Verónica.
No hay nada como estar enamorado para tener esa cara, je,je, es broma...
EliminarUn abrazo ⛄
Vidal y Adelita imagino que tendrán problemas.
ResponderEliminarUn abrazo y buen fin de semana.
Podría ocurrir cualquier cosa, pero te adelanto de que no tengo previsto que los tengan, je,je.
EliminarUn abrazo, buen fin de semana, gracias.
Haber en que terminan estas dos historias de amor. Saludos amiga.
ResponderEliminarLo sabrás muy pronto, Sandra, ya casi está terminada.
EliminarSaludos amiga, buen día 💖