jueves, 2 de enero de 2020

COMEDIA DIVERTIDA CAPÍTULO N°28

A diario... al caer la noche Rodolfo se dirige a ver a Amada, y piensa que seguramente ya estará impaciente.

Es así, aunque...

Se escondió detrás del árbol, esperando que ella le abriese el portón. Allí quedó largo rato y algo no marchaba cómo debería... ya que no hacía acto de aparición. 
En un principio pensó que se habría quedado dormida, después lo descartó porque si algo ella no se perdería sería una noche de amor. 
Esperó y esperó sin atreverse a salir de su escondite, con temor de que el padre de ella lo viese, aquello le producía temor, pensaba que el carcamal era de armas tomar.

Qué poco lo conocía... en realidad, nada.

Al cabo de una hora salió por fin al balcón.  Ella ni imaginaba que había estado a punto de marchar cansado de esperar. 

El padre dormía desde hacía dos horas y de nada ya se enteraba. 

-¿Vos, no me da un beso?

-¡No, no se lo doy!

Rodolfo pensó que allí algo sucedía... hasta un tonto lo habría visto. 
-¿Qué le sucede?

-Vos sabrá qué hizo mal.

-¡Nada!

-Pues no es eso lo que me contaron...

Cada segundo que pasaba estaba más escamado y contrariado.
-No la comprendo, explíqueme para que entienda.

-Vos es un miserable, y yo tonta por quererlo.

-Amada, no comprendo.

-Los vieron salir de semejante lugar.

-¡Ay, Amada! ¿era eso? No se preocupe,  solamente acompañé Vidal a que se estrenara, el pobre no quería seguir siendo virgen.

-Vidal no es como vos.

-Ni como vos tampoco, que perdió su virtud hace mucho.

Al oír aquello se lanzó dispuesta a desorejarlo, pero se lo pensó mejor y se lo comió a besos. 

-Vamos, Amada, aunque primero beberé agua que tengo el gaznate seco.

La joven le entregó el vaso que tenía preparado. Y muy seguro tendrían un placer inmenso. 
Autora Verónica O.M. 
Continuará 

4 comentarios:

La letras, tienen el poder de llevarte a ese mundo dónde todo es posible, deseo te gusten las mias...